Que te adoro, te pongo un candado

"El primer amor es el verdadero, los demás son solo para olvidar"

Eduardo Galeano

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Existe la costumbre entre parejas de enamorados de ir a colocar un candado con sus nombres en los puentes, da igual el puente y la ciudad, lo primordial es que haya hueco para colocarlo, y esto es cada vez mas difícil. Se escribe el nombre de los tortolitos y se tira la llave al agua, super romántico y super ecológico. Que si, que queda muy bonito, mi churri, pero empieza a hacer frío y deberíamos volver al hotel y demostrarnos amor del de verdad.

Debido a la masificacion de estos elementos en algunos puentes, alguno ya empieza a tener problemas estructurales, es el caso del Pont des Arts de París, que sufrió la caída de dos metros de alambrado debido al peso de los candados. En ese puente se estima que cuelgan 700.000 candados con un peso de 18 toneladas aproximadamente. 

Debido a este incidente y para evitar futuros problemas el ayuntamiento de París ha decidido sustituir barandillas y alambrados de este y otros puentes por vitrinas, la medida ha sido recibido con entusiasmo por la fauna acuática y no tanto por las cerrajerias y vendedores ambulantes que tendrán que volver al viejo negocio de las rosas.

Dicen que esta costumbre viene de la novela "tengo ganas de ti", pero va a ser que no, que el autor de la novela se apropió de la costumbre que nació en un pueblo de Serbia, Vrnjacka Banja, durante la Primera Guerra Mundial. 

Curioso que se manifieste el amor con un elemento que simboliza todo lo contrario a la libertad, ahora habrá que buscar otra forma de demostrarse el amor, que os parece lanzaros al agua con las manos entrelazadas desde lo alto del puente, eso es verdadera confianza y una demostración de locura estupenda.