Andaba Jorge Javier Vazquez, el presentador del programa Salvame, ese que nadie ve y todo el mundo comenta, disertando con sus contertulios, economistas de alto copete y estudiosos avanzados en esto de vivir del cuento televisivo, amantes de primos hermanos de artistas nunca reconocidos, sobre las medidas a tomar para evitar una deflación que nos acongoja, debatiendo sobre datos macro económicos y otros menores o micro económicos como suelen llamarlos esa gente que lleva corbata y cartera, En medio del debate sonó el teléfono, era Pedro Sanchez, líder del PSOE, lo recordaran por películas como "El mismo amor", "la misma lluvia" o "Lo mismo me da que me da lo mismo", películas en las que consiguió el papel por ser muy majo y guapete.
Hasta la saciedad y con la boca llena de polvorones ha dicho que no pactaría con populistas, refiriéndose por supuesto a Pablo Iglesias y a su partido Podemos. A lo mejor lo que necesita el amigo Pedro es comprarse un espejo para hacérselo mirar, no es lo mismo dar la cara frente a periodistas y políticos de verdad que ser entrevistado por la sosa de Gloria Lomana a la que todos los entrevistados se le escapan vivos, llamar a un programa de chafarderos como Sálvame y continuar su desfile televisivo visitando El Hormiguero, ¡que nivel Maribel!. Para decir que entiende al parado porque ha estado cinco meses sin trabajo y que va a cambiar las cosas a costa de hacer lo mismo.
Tenga cuidado Pedro, a lo mejor es Pablo Iglesias el que no quiere pactar con populistas.
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