Un canal menos, de momento

Estudiar la evolución del hombre puede resultar fascinante y triste a la vez, estudiar, si es que se puede estudiar, la evolución de la televisión se queda en triste, lo fascinante de la televisión es su pasado, visto en perspectiva.

Un niño que ha crecido con un mando a distancia en la mano no puede comprender las peleas frente al televisor para ver quien era el que se tenía que levantar a cambiar de canal, y solo habían dos canales, el volumen ni se tocaba, antes agudizar el oído que levantarse del sillón.

Se hacían tapete de ganchillo para la mesa de la salita y otro para la televisión, sobre la que perenne se erguía una folklorica en traje de faralaes y un toro. A los coloquios, tertulias o debates, como quieran llamarlo, iban gente con méritos contrastados, por ejemplo, para hablar de economía había reputados economistas, el que nunca faltaba era un tal Jose Luis Balbín, legendario es el tufo que dejaba a tabaco en el estudio todas las noches.

Llegaron los canales autonómicos,  los canales privados, el Canal + y su porno del viernes por la noche que todos intuíamos por diversas técnicas de visualización, y todo un capazo de canales de TDT, con sus videntes y su porno, esta vez sin codificar . Menos mal que ya teníamos el invento del mando a distancia para gobernarlos a todos.

Ahora de vez en cuando se inventa nueva pólvora televisiva, la misma pero con distintos colores. ¿Que funciona dejar a los famosos "tirados" en una isla "remota"?, famosos a los que conozco realmente poco, todos los canales a hacer lo mismo, el mismo concurso de cazatalentos, todos de la manita a hacer programas de cocina y a lanzar famosos a una piscina, que desperdicio de agua por cierto. Sobrevivimos a las Mamachicho (o como se escriba), a las pantuflas de Carmen Sevilla y a la sanguinaria Nieves Herrero para llegar a esto, no es justo.

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Curioso que esta tarde mientras escribía sobre la televisión se diera la noticia del cierre de Canal 9.

Como una de las teorías del comportamiento del universo dice, podríamos llegar al límite de la expansión, y habría dos opciones, un colapso o una contracción. Parece que la televisión a elegido la contracción, empezamos a restar canales, hoy Radio Televisión Valenciana cierra, el No-Do valenciano dejara de emitir por que un tribunal ha rechazado el ERE planteado por la empresa y obliga a la misma a admitir a los trabajadores afectados, el Consell dice que no le salen las cuentas y que readmitir a los trabajadores es inviable para el mantenimiento de este servicio público utilizado para fines políticos por todos los gobiernos que han pasado por aquí.

En el informativo de esta noche, tras conocerse la noticia, la presentadora ha leído un manifiesto, algunos lo han tildado de "light", a mi personalmente me ha gustado a partir del minuto 6.