martes, 26 de noviembre de 2013

Superhéroes de verdad

Últimamente tengo la misma sensación que tiene Superman al zamparse un pastel de Kriptonita, y me dura todo el día.

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Soy aficionado al cómic en general puedo leer tanto actuales con trazo de diseños imposibles hasta clásicos desteñidos, superhéroes, viñetas humorísticas, manga e incluso cómics serios de Robert Crumb, todos conviven en armoniosa existencia sobre las baldas de mis estanterías  . No me considero un entendido, ni un friki, ni siquiera un depravado al que le van los hombres vestidos con pijamas de vistosos colores que se dedican a presumir de superpoderes y de pegar mamporros a los villanos, que siempre acaban perdiendo justo después de tener la victoria en su mano.

No creo que vaya nunca a una convención al estilo de la Comic-con donde se reunen gente que se toma el tema de los superhéroes muy en serio, disertan sobre que personaje ganaría a otro en hipotéticas peleas, y discuten si llevar un supertraje de franela es mejor que vestir uno de felpa, cuando claramente según mi opinión debería ser la licra la tela elegida en cualquiera de los casos, sobre todo en las superheroínas.

Sin embargo no hay muchos comics sobre los verdaderos héroes de la actualidad, esos jubilados que han cambiado su prometido futuro dorado por mantener hijos, nietos e incluso en algún caso excepcional algún fiel animal domestico. Aquellos que vuelven a guarecer en sus casas a los que se fueron, tanto de buenas como de malas maneras, personas con superpoderes tales como la multiplicación de los tupper de paella y el aprovechamiento infinito de cualquier tipo de caldo y que luchan contra el consumismo feroz que infecta a sus protegidos. 

Así que tomen nota, Moore, Mignola, Spiegelman, Gaiman, Crumb, Lee y compañia, ¿para cuando un cómic con superhéroes de verdad?



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Debido a mi economía y al precio de los cómics llevo tiempo comprando y vendiendo a través de Ebay, la verdad es que no me ha ido mal, vendí a buen precio y compre a mejor aun. Lo malo de todo esto es la sensación de perdida cuando tienes que enviar el cómic vendido, aunque lo haya vendido a buen precio. 

Recuerdo un cómic de mi infancia cuyo protagonista era Spiderman acompañado de la Antorcha Humana, los dos salían en la portada, de tapa dura y de color verde. A veces alguien pone este mismo cómic a la venta en Ebay, la persona que lo pone en venta debe saber el valor sentimental que tiene ya que lo ha puesto varias veces en venta, no lo vende, y es incapaz de bajar el precio. Sigo atento pos si acaso, que soy un sentimental, pero no a cualquier precio.




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